Unas papas exclusivas

La llegada de las papas a Europa vino de la mano de los conquistadores españoles, quienes las trajeron desde América. Concretamente de Perú y Bolivia. A la semilla de esas papas que vinieron en primer momento, se les llama “variedades antiguas”, y es en Canarias el único lugar donde se siguen cultivando, unos quinientos años más tarde. Hoy, este tubérculo es Denominación de Origen Protegida y también es conocido como “papas locales”, “tradicionales”, “de color” o “de la tierra” y se clasifican en nada más y nada menos que en veintinueve variedades. Variedades diferentes a las andinas, pero que provienen de ellas. El Macizo de Anaga es una de las que posee mayor biodiversidad agrícola de Tenerife. Las papas se plantan en marzo o incluso más tarde, dependiendo de la variedad y localización del cultivo. Son típicas variedades como las terrentas (o torrentas), Moras, Borrallas y Palmeras.

El clima, el suelo volcánico con minerales de tipo basáltico, junto con el tesón y el saber hacer de los agricultores canarios ha dado lugar a un producto único, que hoy goza de gran aceptación entre restauradores y público en general.

Las papas de color presentan en su piel unos tonos característicos, que van del marrón al negro o del rojo al rosado o incluso al naranja y están marcadas por la presencia de “ojos”. Es una papa redondeada y de pequeño tamaño, si la comparamos con otras variedades procedentes del norte de Europa. La textura, esa que hace delicias al paladar, es cremosa y harinosa, por lo general. 

La papa borralla o mesonera es la estrella representativa de la zona porque, según algunos estudios, es exclusiva de Canarias. Presenta una forma alargada, con ojos algo profundos. Se la reconoce porque su piel es marrón claro con ligeros tonos anaranjados. Una vez cocinada es ideal para platos con salsa o para acompañar con mojo, pues su textura  hace que sea idónea para estas recetas. También existe una variante conocida como borralla rosada o borralla colorada.

El cuidado de la semilla

Para conservar la semilla, la producción se ha llevado a otras zonas, intercambiándose las variedades ya sea entre las diferentes localidades de Anaga, como también con otros lugares como La Esperanza, El Sauzal, Tegueste, San Juan de la Rambla o Icod el Alto. Esta variedad también se cultiva en el Parque Rural de Teno, donde se le conoce como melonera. Con este intercambio se procede al saneamiento de variedades, que facilita su conservación y mejora del cultivo. En Anaga, se celebra el día de la papa borralla, concretamente en Taborno y se ha convertido en una de las citas tradicionales agrícolas más importantes del ámbito del Parque Rural. Nada como brindar merecido homenaje a esta particular y exclusiva joya de la agricultura canaria que se ha conseguido conservar generación tras generación gracias a los agricultores de la zona.