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El origen ligado al mar de Santa Cruz de Tenerife

El origen ligado al mar de Santa Cruz de Tenerife

La influencia del mar, la pesca y el puerto en el municipio es enorme. Un ejemplo muy esclarecedor es que un gentilicio de los santacruceros, ‘chicharreros’, viene del nombre de un pez. En origen, así se llamaba a los pescadores que llegaban a las playas con esa especie y posteriormente se fue extendiendo a todos sus habitantes. Fue el puerto el que desarrolló el pequeño pueblo que crecía alrededor de la actividad que generaba. En 1797, tras ser atacado por los ingleses, que cayeron derrotados, y como reconocimiento al valor mostrado, a que pueblo que iba creciendo se le otorgó el título de Villa.

¿Y hoy, en pleno siglo XXI, qué influencia sigue teniendo? Ciñámonos a la pesca. La isla tiene una concentración muy grande de cofradías pesqueras, hay 10, con unos 400 barcos en los que trabajan cerca de 500 personas. A esos puestos de trabajo habría que añadirles los asociados, los indirectos, como las reparaciones navales o la industria del frío. La pesca por lo tanto significa un nada despreciable porcentaje de la economía tinerfeña.

Una de esas cofradías está en el municipio, en el pueblo de San Andrés, donde el pescador sigue siendo una figura importante socialmente. Pero también influye en la economía, la pesca es un generador de riqueza en la localidad, pues surte de pescado a una gran cantidad de restaurantes cercanos. San Andrés está asociado al consumo de ese producto. El propio refugio pesquero tiene un punto de venta directa de pescado, adonde pueden acudir barcos de otras cofradías isleñas. Ahí las especies que predominan son las pescadas en las cercanías, como vieja, sama, cabrilla, sargo… o algo más oceánicos como chicharros, sardinas y caballas… entre otras especies. Pocos pueblos en Tenerife están tan ligados a una actividad económica como San Andrés lo está al sector pesquero.

Pero Santa Cruz de Tenerife tiene también la Dársena Pesquera, que acoge la lonja de pescado, servicios navales, naves de congelación y puntos de venta al por mayor y al por menor. De la pesca que no se vende en el municipio destaca la comercialización de la tuna, el rabil, barrilote, atún rojo o bonito, que se destina mayoritariamente a otros mercados nacionales. Es esa dársena un puerto más grande, más industrial, destinada mayoritariamente a barcos mayores de 12 metros, pero que pescan con cañas, por lo que sigue primando la sostenibilidad. Estos barcos sí están preparados para jornadas más largas en el mar y en ocasiones pescan lejos de la isla, incluso en las costas de África. Ambos puertos y su trabajo hacen que siga siendo fuerte el vínculo de Santa Cruz de Tenerife con sus pescadores.

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