Despedimos un año “agridulce” en Santa Cruz

Despedimos un año muy complicado. Se va un 2021 que, utilizando una expresión gastronómica, ha tenido que “degustar” y, sobre todo “digerir” la enmarañada herencia de un no menos difícil 2020. La pandemia mundial del coronavirus SARS-CoV2 ha golpeado también a nuestra comunidad y, obviamente, a nuestra ciudad y municipio de Santa Cruz de Tenerife.

Para el proyecto y el club de producto “Degusta Santa Cruz”, el año 2021 que ahora termina podría ser calificado, grosso modo, de “agridulce”. Sin duda alguna, la pandemia ha afectado de lleno a todos y, como no podía ser de otra manera, muy especialmente al sufrido sector de la Gastronomía, la hostelería y la restauración en nuestra ciudad y municipio.

El diccionario de la Real Academia Española (RAE) nos dice que el vocablo “agridulce” significa, textualmente, “que tiene mezcla de agrio y de dulce”. Algo sencillamente obvio, claro está. Pero, seguidamente, sobre el término “agrio”, nos habla de aspectos como “un castigo o sufrimiento difícilmente tolerable…” Por el contrario, respecto del vocablo “dulce” nos habla de aspectos como “sensación agradable, complaciente…”

Si tuviéramos que quedarnos con una sensación en positivo, porque nunca debemos perder la positividad y el entusiasmo, deberíamos quedarnos con el dulce ejemplo de resiliencia que nos ha dado la ciudadanía de Santa Cruz de Tenerife y, en particular, el empresariado del mencionado sector de la Gastronomía, la Hostelería y la Restauración.

Cabe aquí recordar el significado de ese término, “resiliencia”, que ahora y muy lamentablemente se ha popularizado” nos habla de la capacidad de un ser vivo frente a un agente perturbador (como el coronavirus SARS-CoV2) o un estado o situación adversos (como el provocado por la pandemia).  También el diccionario de la RAE respecto de la palabra “resiliencia” nos dice que es la “capacidad de un mecanismo o sistema para recuperar su estado inicial, cuando ha cesado la perturbación a la que había estado sometido”.

La perturbación que estamos padeciendo, está claro no ha cesado, pero también está claro que la ciudadanía y el empresariado de Santa Cruz de Tenerife la han afrontado durante este 2021 que acaba de una manera que hay que valorar y reconocer públicamente. Aquel dicho de “a mal tiempo buena cara” ha acompañado a buen número de santacruceros y santacruceras que no han perdido el ánimo y se han crecido ante la adversidad.

Las estadísticas nos dicen que, solo en nuestras Islas Canarias, alrededor de 37.000 personas se visten cada día con el uniforme o la chaquetilla de cocinero o cocinera. Si esa cifra es cierta (y lo es) imagínense la cantidad de profesionales de los que estaríamos hablando si sumáramos a camareros, baristas, bartenders, sumilleres y, por supuesto, a todos los empresarios y empresarias del sector.

En Santa Cruz de Tenerife, la estadística nos dice que el 13% de los contratos firmados el pasado mes de noviembre, 1.295 para ser exactos, corresponden directamente al sector y la actividad de la restauración, siendo este sector el que, tradicionalmente, contrata a más personal, junto con el personal de limpieza y vendedores de tiendas, representando más de la cuarta parte de los contratos firmados en el municipio.

Los datos correspondientes al tercer trimestre de este año 2021 que acaba informan de que la ciudad y el municipio de Santa Cruz de Tenerife cuenta con 5.667 empleos o puestos de trabajo, directamente relacionados con el servicio de comidas y bebidas. Esto supone que el municipio capitalino es, si miramos el conjunto de la isla, el territorio que más empleo concentra, seguido del municipio de Arona, con 5.302 empleos.

Sin echar las campanas al vuelo, pero con un moderado y responsable optimismo, podemos decir que, actualmente, casi se ha recuperado prácticamente el número de empleos y puestos de trabajo registrados en el mismo periodo antes de la pandemia. Sería importante reseñar y destacar que, a diferencia de lo que ocurre en el conjunto de Tenerife, del total de empleo, el 19% corresponde a autónomos, frente al 9% en la isla.

Se sabe que Tenerife, con unas 4.000 empresas legalmente abiertas al público con la categoría y clasificación de “restaurante”, tiene más establecimiento de este tipo que la suma de las siete Islas Canarias restantes. En el municipio de Santa Cruz de Tenerife, el importante y estratégico sector de la restauración reúne a 2.796 empresas, lo que supone casi el 10% del total de empresas de todo el municipio capitalino.

Esta realidad, obviamente, no es fruto del azar ni muchísimo menos. Creo que, sin falsa humildad, esta realidad tiene directamente que ver con la actividad desarrollada desde hace un par de años por la Sociedad de Desarrollo de Santa Cruz de Tenerife, cuyo consejero delegado es el concejal Alfonso Cabello Mesa y, más concretamente, con las acciones y trabajos ejecutados en materia de gastronomía, a través del proyecto y club de producto Degusta Santa Cruz.

Hay que reseñar que esta realidad la ha desarrollado la Sociedad de Desarrollo y el proyecto Degusta Santa Cruz a través de dos importantes líneas de actuación, como son la actualización de la información de los establecimientos adheridos al proyecto, a través de su base de datos, y la apertura de un periodo para que nuevos establecimientos, libre y voluntariamente, puedan asociarse al mismo.

Esta revisión y actualización de datos partió inicialmente de la cifra de 185 establecimientos adheridos, de los cuales, en una primera ronda, fueron eliminados un total de 20 por cierre de negocios, quedando en la base 165. A esta fecha del año se han sumado un total de 29 restaurantes, que ya se pueden ver en el directorio del proyecto en  www.degustasantacruz.com

Hay que lamentar, obviamente, el cierre de algunos establecimientos por la dureza de la crisis que estamos pasando por partida doble, económica y sanitaria, pero, sobre todo, podemos congratularnos y debemos sentirnos muy orgullosos por las nuevas aperturas y apostar por ellas.

En el directorio de la web del proyecto Degusta Santa Cruz ya están reflejados los nuevos establecimientos que han abierto sus puertas. Así, podemos nombrar al restaurante japonés Kiki (Imeldo Serís, 19 – bajos del hotel Urban Anaga), el restaurante La Forêt (Rubens Marichal López, 10 – subida a Ifara) o el restaurante Mar DeNorte (Aguere, 2 – al lado de las Torres de Cristal, junto al Barranco de Santos), Sarantontón Tapas (Paseo Milicias de Garachico), sin olvidar el renovado y emblemático restaurante-cafetería Atlantis (antes Atlántico), en los bajos del Real Casino de Tenerife, en la Plaza de España.

Además, reseñar muchos y variados establecimientos “gourmets” relacionados directa o indirectamente con la gastronomía, como son las tiendas buenas de exquisiteces o vinotecas con las que cuenta Santa Cruz de Tenerife. Entre ellas, la relativamente nueva panadería y pastelería 100% Hojaldre, de Alexis García (Antonio De Lara y Zárate, 3) o las ya veteranas como Bon Vivant (Puerto Escondido, 3), Gustofino (Suárez Guerra, 47) o Espacio Gourmet (Bravo Murillo, 16), sin olvidar La Garriga (Pérez Galdós 19) y las prestigiosas vinotecas santacruceras, El Gusto por el Vino (Calle San Sebastián 57) y Vinófilos (Adán Martín Menis, 5)

A pesar de todos los pesares, Degusta Santa Cruz se resiste a despedir un difícil año sin mirar al futuro con optimismo y confianza en el empresariado y la ciudadanía de Santa Cruz de Tenerife. Dejamos el complejo 2021 mirando con renovada ilusión y mucho optimismo el año nuevo que llega, con los mejores deseos para todos. ¡Feliz y muy “sabroso” año 2022, desde Degusta Santa Cruz!

Imagen |